|
Sumario
1.
Antecedentes del Certificado Bai Euskarari
1.1 El
Consejo de Organismos Sociales del Euskara, Kontseilua
1.2 El
acuerdo Bai Euskarari
1.3
Proceso de acuerdo y compromiso
2. El
Certificado Bai Euskarari
2.1
Objetivos del Certificado
2.2
Niveles del Certificado
2.3
Condiciones para la obtención del Certificado
2.4
Seguimiento y evaluación de los compromisos
2.5
Coste económico, uso y promoción de la imagen del Certificado
2.6 El Certificado Bai Euskarari en el futuro
1. Antecedentes del Certificado Bai
Euskarari
1.1 El Consejo de Organismos Sociales del Euskara, Kontseilua
Kontseilua
-Consejo de Organismos Sociales del Euskara- es la organización encargada de la gestión
del Certificado Bai Euskarari. Surge en 1997, tras varios años de reflexión y
proceso de confluencia, con el objetivo de agrupar a todas las empresas, federaciones y
entidades no institucionales que trabajan en el ámbito de la normalización de la lengua
vasca. Aunque la dimensión de Kontseilua como tal agrupación es relativamente pequeña
en lo que a personal y presupuesto se refiere, el conjunto de las organizaciones
representadas tiene una presencia social muy considerable. Se trata de 50 entidades que agrupan a varios cientos de
asociaciones o empresas, con un total de 6.000 trabajadores, 240.000 personas con
carácter de socios, y un movimiento económico en su conjunto cercano a los 300 millones
de euros anuales. No todas las entidades del euskara están representadas en Kontseilua
pero sí la gran mayoría de ellas, como por ejemplo, las ikastolas, las asociaciones de
padres y madres de colegios públicos, entidades de enseñanza del euskara a adultos como AEK e IKA, el diario en euskara Egunkaria, o las grandes
editoriales y distribuidoras vascas. Incluso la Academia de la Lengua Vasca Euskaltzaindia,
o la Sociedad de Estudios Vascos Eusko Ikaskuntza, participan como miembros
observadores.
Desde un principio, Kontseilua ha
considerado que la situación del proceso de normalización de la lengua es especialmente
preocupante. Asumiendo que se ha avanzado mucho en las últimas décadas, existe una
crítica a las políticas lingüísticas desarrolladas desde las instituciones, así como
una autocrítica en el sentido de que el movimiento social de la lengua no ha sabido
desarrollar programas de normalización más eficaces, ni tampoco incidir correctamente en
sectores sociales y político-institucionales para impulsar un ritmo más rápido en el
proceso de normalización. De esta doble consideración nace la actividad de Kontseilua:
internamente se desarrolla ya una actividad de reflexión que va a cobrar un impulso
considerable en los próximos meses; a nivel externo se sitúa el Acuerdo Bai Euskarari,
como proyecto para incidir en los ámbitos social y político.
1.2 El acuerdo Bai Euskarari
Mediante la firma
del Acuerdo Bai Euskarari, los agentes sociales materializan la firme determinación de
nuestra sociedad para que el euskara viva y se desarrolle durante el tercer milenio, lo
que, hoy por hoy, no está garantizado. La clave de este proceso radica en implicar a
todos los estamentos de la sociedad en él. El Acuerdo consta fundamentalmente de los
siguientes compromisos:
Compromiso de
participar en un proceso que encauce definitivamente la normalización del euskara.
Compromiso de
realizar y aplicar un Plan Estratégico de normalización lingüística que analizará la
situación de la lengua por sectores y territorios, determinará las medidas
normalizadoras necesarias, y pondrá en práctica compromisos concretos y voluntarios por
parte de cada entidad participante, en coherencia siempre con los planes institucionales
en curso.
Invitación a
todos los agentes sociales de Euskal Herria a participar en esta dinámica de acuerdo y
compromiso.
Kontseilua se
reunió a lo largo de la primavera y el verano de 1998 con tres agentes sociales
referenciales cada uno en su ámbito: el Athletic Club de Bilbao, MCC-Mondragón
Corporación Cooperativa y el sindicato ELA. Las tres entidades mostraron su entera
disposición a participar en esta iniciativa.
1.3 Proceso de
acuerdo y compromiso
1.3.1
Adhesión de entidades referenciales para completar el grupo promotor
La conformidad
expresada por las tres entidades citadas creó un efecto tractor muy superior al esperado,
y el 80 % de las entidades invitadas manifestó su disposición a formar parte del grupo
promotor. Esta labor se realizó paralelamente a la
campaña Bai Euskarari, que tenía como
objetivo escenificar el apoyo mayoritario de la sociedad a la normalización de la lengua
con la intención de crear un ambiente social y mediático adecuado para los agentes
sociales. Como colofón de la campaña, en una movilización sin precedentes, 123.000
personas (sobre una población absoluta de 2.900.000 habitantes) participaron en un acto
celebrado simultáneamente en los cinco estadios de |