Una familia se puede ahorrar 95,2 euros en la factura eléctrica, ya que un aire acondicionado que estaba programado a 19ºC, si se regula a 25ºC, reduce el consumo de 1.600 kWh a 900 kWh en tres meses.
En verano, regular el termostato a una temperatura de 25ºC genera bienestar y no consume excesiva energía